El futuro de la banca es sostenible
17 Jul 2021
La sostenibilidad copa cada vez más portadas, más espacios publicitarios y un espacio más importante en la toma de decisiones de los consumidores, lo que lleva a las empresas a verse obligadas a incorporarla en sus procesos, proveedores, materiales, campañas de Marketing etc.
Pero, ¿Cómo entendemos la sostenibilidad desde el mundo de la banca? ¿En qué ámbitos se puede mejorar dentro del terreno bancario a nivel medioambiental o social? Son muchas las novedades que existen en este ámbito, en el que la colaboración entre el sector público y privado es cada vez más amplia y la banca ha pasado, sin duda, de tener una actitud más bien defensiva ante este nuevo factor a llevarlo como bandera y convertirlo en elemento transformador de su modelo de negocio.
Inclusión financiera como parte de la estrategia de sostenibilidad
Una parte muy importante de la sostenibilidad en el ámbito de la banca pasa por contribuir a la mejora de la sociedad y la inclusión financiera juega un gran papel en esto. Si lanzamos una mirada hacia regiones como Latinoamérica, veremos como muchos bancos apuestan por acercar sus servicios a personas sin capacidad económica, para que tengan la posibilidad de contar con una cuenta bancaria.
Pero no solo basta con este acceso, sino que se debe de educar a las personas para entender el funcionamiento y tener unos conocimientos básicos que les permitan gestionar su dinero, algo que no sucede en todos los países ni categorías sociales. Por tanto, la banca tiene un gran reto en este ámbito, para cuya resolución deberá de contar con el apoyo y colaboración de entes tanto públicos como privados, caminando hacia una banca de todos y para todos.
El impulso de la banca a la inversión sostenible
Otro punto en el que la banca puede influir mucho en la sostenibilidad y el medio ambiente es la gestión de las inversiones. Así, tendrán la capacidad de crear espacios en los que se tenga en cuenta la sostenibilidad de los distintos proyectos a la hora de ponerles en contacto con las empresas de financiación. Así, el banco puede convertirse en una especie de “Green Hub” que fomente este tipo de inversión. De hecho, a nivel europeo ya existe una iniciativa denominada Pacto Verde Europeo, que trata de orientar las inversiones hacia la sostenibilidad ecológica y social para lograr, de cara a 2050, la neutralidad climática.
La banca busca la sostenibilidad desde el interior
De manera interna, y más allá de su repercusión indirecta, el sector financiero también trata de contribuir a objetivos como la lucha contra el cambio climático. De hecho, en la COP25 celebrada en Madrid en 2020, más de 20 instituciones llegaron a un acuerdo para reducir la huella de carbono en sus balances.
Los criterios ESG se encuentran ya en el core de las entidades, apostando por salarios justos y equipos inclusivos e incluso reduciendo el uso el plástico o el papel en el día a día de las oficinas. Gestos que parecen sencillos pero que pueden contribuir en gran medida al cuidado del medio ambiente. La tecnología es también una gran aliada en esta transición hacia la sostenibilidad, y por eso desde VASS integramos esta última en nuestra propuesta de valor para la banca, en la que la sostenibilidad se vuelve una apuesta clave para cumplir con las expectativas de los clientes.