Headless Commerce para el comercio electrónico del futuro
05 Oct 2021
Desde el nacimiento de Internet en 1969, los cambios se han ido sucediendo de manera rápida y cada vez más acelerada. En 1990 se creó la primera página web del mundo y los ordenadores eran todavía grandes cajas que ocupaban los espacios en solo algunos salones y habitaciones. Más tarde llegaría el portátil, los móviles y los Smartphones, que daban una nueva manera de acceder a Internet, introduciendo la tecnología táctil y unas dimensiones totalmente diferentes.
Por no hablar de los asistentes de voz, que acercan Internet sin tan siquiera utilizar otra pantalla. ¿Qué por qué cuento todo esto? Para reflexionar sobre la dificultad de crear webs y Softwares capaces de servir a todos los diferentes dispositivos no solo que existen, sino que probablemente existirán en los próximos años. Y es aquí donde entra en juego el tema de este artículo: Headless Commerce.
¿Qué es Headless Commerce?
Este concepto se basa en la idea de separar la lógica de negocio de los diferentes frontales, su parte más visible, es decir el aspecto y forma con el que interacciona el usuario. Esto hace que a la hora de realizar adaptaciones a los diferentes dispositivos no sea necesario adaptar la lógica de negocio de, por ejemplo, un ecommerce sino tan solo él o los frontales, que conllevan la navegación y la apariencia. Así resulta más sencilla la adecuación a diferentes dispositivos, algo que antes solía hacerse a través de una arquitectura on premise.
Así, se centralizaba todo en una misma plataforma donde residía, por ejemplo, la presentación web adaptada mediante diseño responsive para distintos dispositivos (móvil, Tablet, laptop), proporcionando así la funcionalidad multi-canal. Pero esto ya no es suficiente, pues surgen nuevas formas y dispositivos como Alexa, Google Assistant e incluso elementos de IoT en los que no basta con este diseño responsive sino que se hace necesario desvincular la interfaz de la lógica del site.
Cambios que introduce Headless Commerce en el comercio online
Tradicionalmente las arquitecturas on premise consistían en máquinas físicas del cliente en sus propios datacenters y este era el modelo de trabajo más habitual. Sin embargo, a día de hoy lo más habitual es el hospedamiento en Cloud o los modelos de Software as a Service (Saas), en los que ya no se habla de máquinas físicas, sino que es un servicio mantenido por el propio fabricante.
Esto es realmente ventajoso, pero tiene el problema de que dificulta el poder hacer modificaciones sobre el software, especialmente en los modelos SaaS puros. Este es uno de los motivos por los que se trabaja sobre la separación entre la parte visual, donde el mantenimiento y evolución recae en el cliente o sus proveedores y la parte de back-end mantenida por el fabricante e independiente de los cambios en la apariencia y la adaptación no solo a los distintos dispositivos sino a las necesidades de la compañía que pueden evolucionar en el tiempo.
Una de las grandes ventajas frente a los sistemas más monolíticos, con un todo centralizado, es la gestión de contenidos. Tradicionalmente, en las herramientas de ecommerce, ésta siempre ha resultado bastante más pobre de forma nativa y la alternativa de funcionar con un CMS (Content Management System) resulta complicada, además de encarecer el coste y mantenimiento. Sin embargo, la separación de la lógica y la creación de un Front “descerebrado” (Headless significa literalmente ‘sin cabeza’, sin inteligencia) simplifica mucho todas las tareas al no tener una lógica acoplada.

Ventajas y desventajas de utilizar un modelo Headless Commerce
Aunque la separación de la lógica y el Front de las aplicaciones tiene muchos beneficios, también tiene algunos inconvenientes y es importante tener ambos en cuenta. A continuación podemos ver algunos de los más relevantes:
Beneficios del Headless Commerce
Entre las ventajas de este modelo de trabajo encontramos las siguientes:
- Permite beneficiarse de las ventajas de un sistema basado en Cloud sin el inconveniente de no poder realizar modificaciones de manera sencilla. Así, se evitan las necesidades de mantenimiento, la necesidad de arreglar los bugs o las limitaciones de capacidad (ya que esta puede aumentarse o disminuirse fácilmente ante campañas de ecommerce importantes como la Navidad, Black Friday, etc.). Los cambios realizados en el back-end por el proveedor de Cloud son totalmente transparentes al Front.
- Permite realizar despliegues y evoluciones de la interfaz separados de la lógica, por lo que mientras que antes al hacer un cambio era necesario desplegarlo todo, pues afectaba a la página al completo, ahora esta tarea se hace mucho más sencilla y se acortan los tiempos de pruebas y la incidencia de errores.
- Por otro lado, y a nivel estratégico para el negocio, se modifica el perfil de los desarrolladores necesarios para el mantenimiento y los cambios en los frontales.
Por ejemplo, los desarrolladores Front solo necesitan tener conocimientos de frameworks como Angular y lenguaje Javascript para hacer todas sus labores, pues no es necesario intervenir en la lógica y en otras áreas de desarrollo. Por tanto, resulta más sencilla la gestión del capital humano al poder contar con diferentes perfiles igualmente útiles (centrados en Front o en Back).
- Las opciones para el back-end son diversas y a elección de la empresa, pues ya sean sistemas más tradicionales, Cloud o híbridos, la separación de la inteligencia de la presentación aportará igualmente beneficios y ventajas.
- Además, se amplía el alcance tecnológico, al poder escoger de manera independiente las tecnologías utilizadas para el Front y el Back o incluso poder reemplazar completamente la tecnología de una de las dos partes.
- Por último, aumenta la personalización del Customer Journey, pues el sistema de back-end permitirá reconocer al comprador sea cual sea el canal que utilice y por diferente que sea la forma de presentación de la información. Este es el concepto denominado Omnicanalidad.
Desventajas del Headless Commerce
La mayor desventaja de una arquitectura Headless con Back y Fronts totalmente desacoplados frente a un sistema tradicional monolítico se produce cuando el back-end no es un modelo SaaS sino que es mantenido y evolucionado por el cliente/proveedor. En este escenario hay una sobrecarga de gestión ya que hay que administrar dos proyectos donde roadmaps, tecnología y equipos son diferentes y necesitan tener protocolos para evitar la afectación de cualquier cambio. Es decir, que llevar a cabo dos proyectos resulta más costoso que realizar uno solo, aunque en ambos haya el mismo número de tareas.
Recapitulando sobre todo lo anterior, podemos ver como Headless Commerce ofrece una gran potencia para adaptarse a cualquier dispositivo, amoldando el negocio ecommerce allí donde el cliente está, tanto a los dispositivos existentes (ordenador, móvil, asistentes de voz, WhatsApp, aplicaciones, IoT…) como a nuevas formas de mostrar la información que puedan surgir en el mercado. Ya no es necesaria una pantalla ni un desarrollo específico para cada canal de comunicación, sino que los desarrollos se vuelven multicanales y tanto la tarea de los desarrolladores como los costes en tiempo y dinero de las compañías se reducen.
Además, se acelera el Time to Market, algo tan fundamental en un entorno que cambia constantemente y con unos consumidores que adoptan estos cambios con gran rapidez.