La eficiencia operativa en la administración pública

La eficiencia operativa en la administración pública

La eficiencia operativa debe llegar a la administración pública. Garantizar unos servicios ágiles y flexibles es importante para el bienestar de la ciudadanía.

27 Sep 2021

Al igual que el cliente es el centro de una empresa, la población de un país debería serlo para la administración. Pero ¿cómo asegurar esta mejora de los servicios públicos? Descúbrelo a continuación.

¿En qué consiste la eficiencia operativa?

Las empresas siempre buscan aumentar la eficiencia de sus operaciones. Esto lleva a procesos cada vez menos costosos y más rápidos. Al final, toda esta búsqueda se traduce en precios bajos para los compradores, quienes se sentirán satisfechos. Las administraciones necesitan adoptar esta filosofía para mejorar su relación con los ciudadanos.

La eficiencia operativa es una estrategia que se ampara en el desarrollo tecnológico. Los diferentes avances se van acumulando para crear procesos más ágiles que los anteriores. Esto supone desechar maquinaria que no da la talla o contratar personal con las habilidades adecuadas. La informática también ha ganado peso con el paso de las décadas, y en la actualidad es clave para garantizar la eficacia.

Una de las tecnologías que más contribuyen a la eficiencia es la automatización. Existen diferentes tareas en cada proceso que apenas aportan valor y que son repetitivas. Por estas razones, son susceptibles de ser automatizadas, lo que permite realizarlas con rapidez y movilizar los recursos hacia otras áreas más valiosas. De esta forma, se reduce el tiempo en toda la cadena de acciones que conforma el proceso en sí.

El capital humano, en este caso los trabajadores públicos, puede entonces dedicarse a actividades de mayor utilidad. Por ejemplo, un chatbot puede responder a dudas comunes, mientras que las personas solucionarán las más complejas. Actuar de este modo también ayuda al ciudadano, quien recibirá la ayuda que necesita en el menor tiempo posible.

La robotización es otro aporte inestimable para ganar eficiencia. Una amplia variedad de trabajos de bajo valor añadido puede sustituirse por máquinas o programas informáticos. Este es el caso de la tramitación de documentos. Un software especializado es capaz de analizar y procesarlos a mayor velocidad. Adoptar este enfoque es otra apuesta por la eficiencia. 

¿Por qué es importante la eficiencia en los procesos?

Para empezar, permite ahorrar costes en diferentes áreas. Una de ellas es el capital humano, pero también afecta en el plano económico. No es necesario disponer de una plantilla enorme para realizar tareas repetitivas. Un programa informático contribuye en ambos sentidos y no destruye puestos de empleo. Los trabajadores se desplazan hacia puestos más productivos.

Junto a esto, se da un mejor trato a los ciudadanos, quienes realizarán sus trámites más rápido. Por tanto, la relación con la administración, en todas sus formas, será satisfactoria. Esto también afectaría a las empresas, las cuales podrían ponerse en marcha con menos trabas, por ejemplo.

En definitiva, la eficiencia operativa debe aplicarse en las administraciones públicas. Para apoyar su implementación, en Vass celebramos el 21 de octubre el III Foro de Eficiencia Operativa. A este evento acudirán especialistas y empresas que han tenido éxito aplicando este paradigma.

Al igual que el cliente es el centro de una empresa, la población de un país debería serlo para la administración. Pero ¿cómo asegurar esta mejora de los servicios públicos? Descúbrelo a continuación.

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