Tecnologías para asegurar la trazabilidad en la industria alimentaria

 También ofrece la posibilidad de conocer si unos alimentos han estado en contacto con otros (importante por ejemplo para alergias e intolerancias), cómo ha sido el proceso de transporte o si en algún momento se han modificado las condiciones del ambiente (por ejemplo, una rotura en la cadena de frío, o una temperatura superior a la recomendada para un determinado producto). En definitiva, podríamos conocer todo lo que rodea a un producto desde que se produce hasta que llega al mercado. ¿Pero cómo podemos lograr una trazabilidad completa y fiable? Existen tecnologías y soluciones como el Blockchain, IoT o IOTA que facilitarán este proceso.

Blockchain para una trazabilidad alimentaria confiable

Una de las principales características de la tecnología Blockchain es su inmutabilidad. Es decir, que una vez se escribe algo no se puede eliminar ni modificar. Esto hace que sea mucho más segura y confiable que otras tecnologías, gracias a que todos los bloques de la cadena están enlazados. Por tanto, si se modifica la información en cualquiera de ellos, se rompería la cadena y se evidenciaría que se ha realizado un cambio. Esto convierte al Blockchain en una tecnología perfecta para evitar el fraude alimentario o la modificación de información sobre un producto concreto. Pero, para poder almacenar cualquier tipo de información, primero necesitaremos obtenerla

Del Blockchain y el IoT al IOTA para asegurar la trazabilidad alimentaria

La sensórica será fundamental para conocer desde las condiciones climáticas cuando se está produciendo el alimento (agricultura y ganadería) hasta el registro de movimientos bruscos o el control de temperatura en el transporte, o cualquier otro dato que necesitemos obtener. Por tanto, el IoT tiene un papel muy importante para asegurar la trazabilidad, pero en ocasiones resulta complicado tratar grandes volúmenes de datos. Cuando esto sucede, entra en juego el IOTA.

El IOTA es en realidad una tecnología de libro mayor distribuido (DLT), al igual que lo es el Blockchain. Este último es el más conocido entre este tipo de tecnologías, pero existen muchas otras que ofrecen soluciones de valor.  Concretamente, el IOTA permite recoger información de distintos puntos con un menor esfuerzo de computación y es una tecnología perfecta para trabajar con el IoT. En este caso, el papel del IOTA sería hacer un apunte contable con la información que interese sobre cada sensor o dispositivo, pudiendo monitorizar y ofrecer esa trazabilidad desde el origen de la producción de las materias primas hasta su comercialización. Toda la información quedará registrada en un libro mayor, y podrá mostrarse de distintas formas (a partir de aquí entran en juego etiquetas con códigos QR, códigos de barras, etc.).

En VASS ofrecemos a nuestros clientes soluciones de trazabilidad, trabajando desde el análisis de negocio al diseño de la solución, el desarrollo y el gobierno. Todo ello para que puedan ofrecer una mayor transparencia tanto a sus consumidores como a los organismos públicos encargados de vigilar el cumplimiento de la normativa alimentaria.