La pandemia ha traído consigo una subida de la inflación derivada del aumento del coste de la energía (que se traduce en un aumento del 42% de la factura de la luz en los hogares de España según la OCU), la subida de los costes logísticos (aumento entre el 1000-1500% en el transporte de mercancía desde China a Europa y América) y la escasez de materia prima derivada de los movimientos tan bruscos en la demanda y los cuellos de botella originados en la cadena de suministro, todo ello está provocando una situación donde la cuenta de resultados de las compañías del sector se están viendo muy impactadas. Con este panorama en el sector, la tecnología es un habilitador que permite establecer mecanismos de reducción de los costes operativos, y adicionalmente permite mecanismos para aumentar los ingresos; no olvidemos que el sector de comercio electrónico sube en tasas de un 10-15% anual y se detecta una mayor adopción de ecommerce (80%), aumento de los pagos digitales (+26%) con especial foco en el sector de la alimentación (+27%).